El libro que os presento, no recoge textos de homilías pronunciadas en las celebraciones de los domingos durante el ciclo B; reúne, más bien, reflexiones muy personales del autor, que le nacieron espontáneamente y han sido publicadas cada domingo en redes sociales. Su mérito, si alguno, está en su originalidad: desde la vida diaria, unas veces sorprendente, las más, gris y monótona, Nando ha querido leer él y exponer a otros lo que el Evangelio le sugería para volver a releer la vida sometida a la luz de la Palabra y exponiéndola a su fuerza vivificadora. Antes de publicadas, estas reflexiones han sido compartidas entre un grupo de amigos. Y quienes las recibieron, a su vez, las difundieron ampliamente. Ello ha animado al autor a ofrecer a una más amplia audiencia una personalísima visión de la realidad, que no escamotea la presencia de Dios. Ojalá que su publicación ayude a entender que vida y Evangelio, existencia personal y Palabra de Dios, no son realidades incompatibles, moviéndose Dios en la entraña del mundo y de la historia.
