Cuando las cuatro jovencitas (Nancy, Elinor, Mary y «Billie»)comandadas por Miss Helen Campbell emprenden su viaje en El Cometahacia el oeste de los Estados Unidos, se diría que lo hacen justamente en el empeño de desviarse de ruta. El accidente de un «aeroplanista», la desaparición de su preciado automóvil, una visita a un ranchomusical y toda clase de encuentros con una galería descabalada depersonajes y eventos singulares (de Blaise Cendrars a un cuadro deHenri Rousseau, de un forajido que se convierte en estatua a unapuerta parlante) obligan a las Motor Maids a tomar decisionesinesperadas.
A partir del desvío y la reescritura lúdica deun texto de 1911 (Motor Maids across the Continent, de KatherineStokes), Ron Padgett nos entrega una historia hilarante y extrañamente conmovedora, insertándose en una corriente de vanguardia -de fuenteseuropeas y norteamericanas- que lleva su propuesta hasta sus últimoslímites. Un texto genuino y heterodoxo, de gran audacia inventiva,que, en la inspirada traducción de Diego Garrido, viene a refrescar la concepción realista de la novela contemporánea y cuestiona l