¿Tienes que hablar de un asunto delicado con un compañero, pero tienes miedo de que reaccione mal? ¿Temes que las emociones te impidan tomar una decisión? No te preocupes, hay formas de comunicar que no son combativas, sino constructivas. Te permitirá: Descubrir las raíces de las fricciones. Mantener una mentalidad positiva. Resolver los problemas conjuntamente. Acordar el camino a seguir.